jueves, 7 de febrero de 2013

Vida y Muerte

Aunque el título de este post suene un poco dramático a simple vista, en realidad pretendo hablar de meditación, y de paso hacernos conscientes de la relación tan cotidiana que tenemos con estas dos aparentemente irreconciliables formas de expresión...la vida y la muerte.
Y esto solo podemos hacerlo bajo la premisa de que analizamos desde una mente dual, que compara y divide. Esto no es ni bueno ni malo...es simplemente la expresión básica desde la que nos movemos como seres humanos.
Hablar de meditación sería algo complejo, pero voy a intentar simplificar, teniendo en cuenta que hay muchas formas de considerar lo que es meditar. Y la forma más simple en que se puede definir la meditación sería...vivir Aqui y Ahora...justo en el instante presente...teniendo en cuenta que el vocabulario también puede alejarnos de ese instante presente, ya que intentar comprenderlo intelectualmente no siempre sirve para llegar a la esencia de la meditación: se requiere practicar.
Y la forma más sencilla de empezar a practicar es observando nuestra respiración. Algo sencillo y a la vez increiblemente complejo, que no difícil.
Y aqui es donde enlazamos el concepto de vida y de muerte...con la inspiración y la espiración.
Morimos con la exhalación...volvemos a renacer con la inhalación....
Morimos a todo lo que somos, al la ilusión de lo que somos bajo el espejismo de la personalidad, al sentido de identidad que nos proporciona todo aquello que consideramos que nos define...
Y volvemos a renacer en cada instante a algo nuevo, a algo sin definir, a algo sin forma ni concepto...
Aprender a tomar, aprender a soltar...y liberarnos del apego de nuestra imagen para respirar en el vacío...puede acercarse al concepto de meditación.
Dejarse llevar por el vértigo de "no ser", de soltar, de una mente que solo observa...puede ser el comienzo de una práctica fascinante, de una exploración infinita.

No hay comentarios:

Publicar un comentario